Ex-CEO de Audi admite culpabilidad de Dieselgate para evitar la cárcel

Han pasado ocho años desde que la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA) descubrió la manipulación de Volkswagen de las emisiones contaminantes , conocida como Dieselgate . A pesar de esto, se sigue hablando del escándalo.

De vez en cuando, Dieselgate aparece en las noticias, principalmente debido a sentencias judiciales. Esta vez es tras la admisión de culpabilidad por parte de Rupert Stadler , el ex director general de Audi , que lleva años en el punto de mira y acaba de admitir su responsabilidad en el Dieselgate.

La confesión es parte de un trato con el juez

A pesar de que el escándalo del Dieselgate de Volkswagen estalló hace casi diez años y la marca sufrió pérdidas económicas considerables, los tribunales no han olvidado este asunto que sigue siendo uno de los mayores escándalos de la historia del automóvil.

La justicia alemana sigue persiguiendo a los responsables de este caso, pero no se trata de procesos contra Volkswagen, sino contra algunos de sus exdirigentes. Entre ellos se encuentra Rupert Stadler , quien fue arrestado en 2018 por su presunto papel en el escándalo cuando era director ejecutivo de Audi .

Poco después de su arresto, Volkswagen rescindió el contrato de Rupert Stadler y, unas semanas después, quedó en libertad bajo fianza. Sin embargo, en 2020 un tribunal de Múnich comenzó a juzgarlo por su participación en el caso.

Stadler se desempeñó como director ejecutivo de Audi entre 2007 y 2018.

Según la agencia de noticias alemana DPA, tres años después, Stadler llegó a un acuerdo con el juez para evitar la cárcel al aceptar la responsabilidad de Dieselgate.

Como parte de este acuerdo, Stadler deberá pagar 1,1 millones de euros , que se suman a los 4,1 millones que ya había sido condenado a pagar en 2021. Esta última sentencia estaba ligada a que no había asegurado, a 21 de septiembre de 2016 , que los motores diésel de 3,0 litros y 4,2 litros desarrollados por Audi no contenían software ilegal, una vez que se reveló su existencia.

A pesar de ello, hasta ahora los funcionarios alemanes siempre han afirmado que desconocían la manipulación de las emisiones de miles de coches por parte del Grupo Volkswagen mediante software entre 2009 y 2015, incluidos algunos modelos de la marca de la que Stadler fue máximo responsable desde enero de 2007. a septiembre de 2018.